Fractura de radio distal(fractura de muñeca)
El radio es uno de los dos huesos del antebrazo. Una fractura del radio distal
es una rotura de este hueso a nivel de la muñeca. El radio es el hueso
que se rompe con mayor frecuencia en el brazo.
Causas y síntomas
Las fracturas de radio distal ocurren con mayor frecuencia por una caída sobre un
brazo extendido. Las fracturas del radio distal pueden ocurrir en pacientes
jóvenes por una lesión de alta energía o en pacientes mayores por una caída
desde una altura de pie.
Los síntomas típicos incluyen dolor, deformidad, sensibilidad, hematomas e hinchazón.
Evaluación y tratamiento
La evaluación inicial incluye un historial médico, un examen físico y radiografías para evaluar
el desplazamiento de la fractura. La evaluación física también debe incluir un examen del pulso,
la función nerviosa, la hinchazón y la integridad de la piel. Los fragmentos pueden perforar la piel,
lo que podría aumentar el riesgo de infección. En algunos casos, se necesita una tomografía computarizada
para evaluar fracturas complejas.
El tratamiento inicial incluye la colocación de una férula en la muñeca, hielo y analgésicos.
El tratamiento adicional está dictado por el patrón de fractura, la edad y el nivel de actividad.
Por lo general, se recomienda un tratamiento no quirúrgico en aquellos casos en los que la fractura es
estable y hay una buena alineación de los huesos en una férula. A esto le seguirán radiografías semanales
para controlar cualquier movimiento. El tratamiento quirúrgico está indicado en fracturas inestables o con
desplazamiento no reducible. Si el tratamiento quirúrgico está indicado, se realiza con una placa y tornillos
para mantener el hueso en su lugar como un procedimiento ambulatorio a través de una pequeña incisión. Después
de la cirugía, se necesita inmovilización con una férula o un yeso durante algún tiempo. Típicamente actividades
ligeras, como nadar o ejercitar la parte inferior del cuerpo en el gimnasio, puede comenzar dentro de 1 a 2 meses
después de retirar el yeso. Las actividades más extenuantes, como el esquí o el fútbol, pueden reanudarse después
de 3 a 6 meses.